Identidad IMAP

Nos distinguimos por ser una escuela de alto rendimiento académico y de inspiración católica. Ofrecemos una formación académica sustentada en valores éticos, morales y religiosos, para que nuestros egresados tengan las herramientas para adaptarse a las exigencias de nuestra sociedad actual y futura como personas íntegras y competitivas. La formación académica de nuestros alumnos está inspirada en la vida y obra del mártir mexicano, zacatecano y guadalupense, el Padre MIGUEL AGUSTÍN PRO. El espíritu que se busca imprimir en todo alumno del plantel es de reciedumbre cristiana, de trabajo, tenacidad y alegre fidelidad a los principios más altos de la formación humana. 

Desde 1967 hemos sido parte de la formación integral de jóvenes y adolescentes, abarcando las áreas humana, intelectual, social y espiritual.

Lograr formar cristianos firmes en su fe, comprometidos y útiles a la sociedad en que viven, es la finalidad del IMAP, por ello el lema que aparece en el escudo de la escuela, es similar al de la ciudad de Zacatecas: "El Trabajo y la Oración, Todo lo Vencen".

Historia.

1967, nace el Instituto Zacatecas. El Instituto Zacatecas se instituyó como una escuela secundaria en noviembre de 1967, para dar servicio a la comunidad de Guadalupe, la cuál carecía de este nivel educativo. El nacimiento del Instituto Zacatecas, tuvo como principal objetivo el respaldar oficialmente los estudios de los seminaristas, pero como eran pocos jóvenes, abrió sus puertas a todos los estudiantes que deseaban cursar aquí su educación media básica, lo que motivó a que la población identificara al Instituto Zacatecas, como "la secundaria del seminario", pese a que su nombre oficial era "Instituto Zacatecas".

Desde su inicio, la escuela ha estado incorporada a la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) y de ella depende académicamente hasta el día de hoy.

1974-1975, nace la Preparatoria

Para el ciclo escolar 1974-1975, se abrió en el Instituto Zacatecas la sección de preparatoria, independizándose económicamente del Seminario, por lo que desde entonces se sostiene únicamente con los recursos recabados del pago de colegiaturas de los alumnos.

Cabe señalar que para ese año de 1974, la preparatoria del Instituto Zacatecas era la única que existía en Guadalupe, Zac.

Fundadores y Directores.

Los fundadores del Instituto Zacatecas, como secundaria y preparatoria fueron dos sacerdotes y una religiosa, los Padres Juan Padilla Trueba y Carlos Félix Díaz y la Madre Elena López, quienes preocupados por la formación crisitiana de la juventud, y movidos por el espíritu de servicio y la gracia de Dios, se dieron a la tarea de conformar este centro educativo que ha formado a miles de jóvenes, no sólo de Guadalupe sino también de Zacatecas y de otros municipios del Estado.

El primer director de esta institución en el año 1967, fue el Lic. Abraham Torres, sucediéndolo en el cargo al año siguiente (1968), el Lic. Jorge Guillermo Zezati y posteriormente, desde 1969 hasta 1978, ocupó la dirección la Madre María Elena López.

Para el ciclo escolar 1978-1979, la dirección estuvo a cargo de la Madre Bertha Soto Ortega y en agosto de 1979, el Señor Obispo Diocesano, Rafael Muñoz Núñez, nombró director del Instituto al Padre Carlos Félix Díaz, cargo que desempeñara hasta el año 2014.

En el 2014 el Pbro. Juan Diego Chávez García fue nombrado director del Instituto por el Sr. Obispo Sigifredo Noriega Barceló. Actualmente la Dirección está a cargo del Lic. Juan Carlos Barrón Morales. 

El instituto crece.

Como señalamos, la "preparatoria del seminario" fue la primera que se estableció en Guadalupe, lo que dió lugar a que los alumnos "internos" (seminaristas), tuvieran que convivir en las aulas con los "externos". Esta convivencia armónica entre seminaristas y alumnos motivó que la escuela tomara del seminario la disciplina y seriedad que la han caracterizado, por lo que la sociedad de Zacatecas la ha preferido para la educación de los jóvenes

Pronto la demanda de ingreso a las aulas de Instituto Zacatecas, aumentó considerablemente año tras año, hasta el punto de no poder admitir a todos los aspirantes, por lo cuál hubo necesidad de recurrir a la aplicación de los exámenes de admisión. En 1985, en el mes de enero, tomó posesión como obispo de Zacatecas, Monseñor Javier Lozano Barragán, quién más tarde decidió que la preparatoria debería de separarse del seminario y para tal efecto, decidió que se edificaran nuevas instalaciones en un terreno que antes había sido el establo del seminario.

La construcción de la nueva escuela inició en el mes de abril de 1986, y para agosto del mismo año, se inauguraron los salones de clase del primer año de preparatoria, los cuales comprendían sólo la planta baja del edificio. La planta alta del mismo se inauguró en enero de 1987.

Los recursos para la edificación de las nuevas instalaciones, se obtuvieron gracias a la organización de colectas y diversas rifas, a la vez que se recibieron donativos importantes de parte de Gobierno del Estado.

Con estos fondos y el remanente del cobro de colegiaturas, se logró construir para el año de 1988, el edificio de laboratorios, la biblioteca y la capilla, además de la cancha de basquetbol y se colocó piso de concreto en el patio.

Renace la secundaria.

En el mes de noviembre de 1990, se inició la construcción de la sección de secundaria: salones, sanitarios y canchas deportivas. En agosto de 1991 inició clases lo que fue la primer generación de secundaria, reiniciándose así, lo que ya en 1967 había dado origen a esta institución: una secundaria al servicio de la sociedad de Guadalupe.

IMAP.

Lo que hasta 1988 fue el "Instituto Zacatecas", cambió su nombre el 23 de noviembre del mismo año, por el de "Instituto Miguel Agustín Pro" (IMAP) en honor al ilustre mártir mexicano, el PADRE MIGUEL AGUSTÍN PRO, nativo de este población de Guadalupe, Zac.

La formación de los alumnos.

Inspirados en la actuación de este mártir mexicano, zacatecano y guadalupano, el espíritu que se busca imprimir en todo alumno y alumna del plantel es un espíritu de reciedumbre cristiana, de trabajo, tenacidad y alegre fidelidad a los principios más altos de la formación humana. Lograr formar cristianos firmes en su fe y útiles a la sociedad en que viven, es la finalidad del IMAP. Nuestro lema se inspira en el de la ciudad de Zacatecas, es decir en el valor del esfuerzo, completado con el valor de la relación con Dios: "El Trabajo y la Oración, Todo lo Vencen".